jueves, 25 de mayo de 2017

La Rota Vicentina por la costa del sur de Portugal

Para estrenar mi nuevo blog empiezo por esta aventurilla por los alcantilados de la costa del sur de Portugal. Es la primera vez después de muchos años que me voy solo a "descubrir" un sitio. Ha sido, un poco..." volver a los viejos tiempos". Me apetecía.

Lo decidí unos días antes. Cayó en mis manos un artículo sobre este recorrido y me gustó. Hay una página web en donde está toda la información. Muy buen trabajo: http://pt.rotavicentina.com/ Hay 2 rutas:la histórica (que va mas por el interior...) y la de los pescadores, de 4 días de andar, que es la que hice yo. Va siempre pegada a la costa. Un lugar muy salvaje con pueblos pequeños de pescadores y turismo minimalista. Las jornadas son de unas 6 horas. Un poco incómodo pues se anda mucho sobre arena, pero los paisajes..., las calitas..., el Atlántico...

He logrado mi objetivo: mini vacaciones, mar, sol, fotos... Contento.

Bajé en bus a Madrid. Vuelo barato a Lisboa y después otras 3 horas de bus al punto de inicio. Estas fotos son de Lisboa.


En Lisboa dormí en casa de mi amigo Fernando Ferreira.

Primera noche en Porto Covo. He dormido en Hostels (Albergues) compartiendo habitación para abaratar. Muy limpios y agradables. Con la comida me he permitido mas lujos....

Pueblos pequeñitos y preciosos.





¡Y a empezar a andar!

Siempre me han gustado las sombras. Y mas si vas solo...






Excelente balizaje. Además te puedes bajar desde la web los tracks para el gps (no necesarios...) y mucha información de cada etapa. Muy cómoda y sin complicaciones. Para disfrutar.

¿Veis las cigüeñas? Había un montón. Estaban en cada elevación de rocas. Cada pareja con dos crías.

Todos los pueblos tienen la misma estética. Casas pequeñas blancas con ribetes azules o marrones.


Mi primer baño. No hizo demasiado calor. En verano si que tiene que ser duro.

Mis lujos gastronómicos... Esta vez caracoles pequeños ¡de tierra!. Es típico y están buenísimos.



Mas cigüeñas... Cada vuelta de esquina se descubría un nuevo espectáculo. Es el paraíso de los que busquen pequeñas calas sin nadie...

Zambujeira do Mar en donde dormí también.

Ojo. Ser peligroso.

Furgo hippy.

¿A que os están dando ganas de ir?


Y de vuelta a Lisboa y a casa. Tienda de conservas portuguesas.
¿Os ha gustado el reportaje? Acepto comentarios (no muy duros porfa).